Capitulo 6.

Día nuevo comenzaba, prometía ser mejor que todos los pasados desde que estoy en Barcelona, pero nada más lejos de la realidad.
Tocaron el timbre, y fui abrir.
Natalia: ¡HOLA!
Irene: ¿Que hora es?
Rocío: La hora en la que te tienes que vestir e irnos a desayunar.
Irene: Vale, esperadme aquí.
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Y me maquille algo, y salí con ellas a dar una vuelta.
Entramos a una cafeteria cerca de casa.
Pedimos unos chocolates, y Mousse de chocolate. ¿Se nota que nos gusta el chocolate no?
Natalia: ¿Cómo has pasado la noche?
Irene: Bien, ¿Y vosotras?
Rocío: Mi vecino de al lado debería de estar encerrado en un manicomio en serio.
Natalia: ¿Tan sólo un manicomio? ¡CÁRCEL!
Irene: Hala, ¿que pasa?
Rocío: Pone a Shakira a todo volumen a las 5 de la mañana.
Irene: Ese tío no puede estar bien...
Natalia: ¡CÁRCEL!
Rocío: Ya esta que te están mirando raro.
Natalia: Es que me da un coraje el tio ese...
Irene: Normal, pero bueno mejor Shakira que no Jotas o otras cosas...
Natali: Si, tiene buen gusto.
Rocío: ¿Te ha llamado el señor Afellay?
Irene: ¿Porque me sacas al tio este en todos lados?
Natalia: Porque nos gusta chinchar.
Rocio: Simplemente y llanamente.
Irene: Ah, venga. Me quedo más tranquila.
Natalia: ¿Y bien?
Irene: Que no, pero no se lo cogería.
Rocio: ¿Porque?
Natalia: No entiendo Por-que.
Irene: JAJAJAJA ya esta eh.
Rocío: Siempre se nos ha dado bien.
Natalia: No es por fardar... pero molamos.
Irene: Porque no quiero volver a ver-lo
Rocío: Será very imposible. Porque mira quien a acabado de entrar por la puerta.
Irene se giro y vió como era él.
Natalia: Tengo miedo, esto no es normal.
Irene: ¿No le habreis llamado no ¬¬?
Rocío: Si tuviera su numero estaría entrando con él. ¿Te queda claro?
Irene: ¬¬
Natalia: Que viene...
Irene: Pues que venga.
De pronto apareció al lado de las tres. Con una amplia sonrisa. Aunque sus ojos estaban algo hinchados.
Natalia: Hola Ibi.
Rocio: Soy Rocío. Y ella es...
Natalia: Me llamo Natalia. *Sonrió*
Ibi: Soy Ibrahim, encantado *Le dio dos besos a cada una*
Rocío: Bueno pues nosotras nos vamos que... vamos a comprar un gato...
Ibi: No hace falta, me voy a coger mi desayuno... ¡Hasta otra!
Rocío: ¡Adiós!
Natalia: ¡Irene!
Irene: ¿Sois tontis o que?
Rocío: Pero si es un cielo de chico.
Irene: Que me dejeís.
Natalia: Perdón...
Empezo a sonar el móvil de Irene, así salio a fuera a responder.
Irene: ¡Hola mamá!
Karen: ¿Cóm te ha ido?
Irene: Bien, ya encontré piso.
karen: Muy bien, ¿Has conocido a alguien?
Irene: Dos chicas muy majas.
Karen: Me alegro... ¿Que tal con...?
Irene: Bien, estuve cuatro días en su casa.
Karen: Ah, bueno...
Irene: ¿Que tal esta adán?
Karen: Bien, aqui comiendo chuches.
Irene: Para que cambiar.
Karen: Si esta así bien, dejalo *Rio*
Irene: Bueno mamá te dejo que voy a desayunar, aunque se habrán comido ya la mousse.
Karen: Vale, que aproveche. tequiero.
Irene: Y yo, besos para todos.
Colgo y se fue de nuevo para dentro.
Rocio y Natalia sonreían sin parar.
Irene: ¿Que os pasa?
Rocío: ¿A nosotras? Nada...
Irene: ¿Vamos ya no?
Natalia: Nosotras sí, a ti te queda...
Irene: ¿Me habéis dejado Mousse?
Natalia: No, nos la hemos comido...
De pronto el camarero dejó un plato con más Mousse.
Irene: Pero si yo no quiero más...
Rocío: Nosotras no la hemos pedido..
Mire hacía delante y lo vi sonreir mientras se tomaba el café.
Irene: Pues no me da la gana. *Se levanto, cogio el bolso y se marcho para la puerta*
Natalia: Estas Holandesas.
Rocío: Ven, vamos a llevarle esto a Ibi.
Cogieron el plato y se lo dejaron al lado.
Rocío: Lo siento, está un poco dolida...
Ibi: Se nota, gracias por todo.
Natalia: No es nada ya seguimos nosotras.
Ibi: Gracias.
Las chicas sonrieron y se fueron para la puerta donde estaba ella. Un pelín cabreada.
Rocío: No tienes derecho a ser así con él.
Irene: A lo que tengo derecho es a comerme eso y hacer como si nada hubiera pasado ¿Verdad?
Natalia: Tampoco es eso, pero no seas así.
Irene: Si lo llego a saber no salgo.
Dicho esto se fue andando para su casa donde se quito al ropa y se puso el pijama. Aquel que nunca se debería de haber quitado.
Paso la mañana viendo la tele, y comiendo pipas.
El móvil sonaba, era Rocío y Natalia, pero pasaba de cogerlo. Eso no se hace y menos sabiendolo todo.
Volvieron a llamar y esta vez era Ibi.
A la nada llego un sms de Natalia.
-Lo sentimos mucho, pero creímos que era lo mejor para animarte. Tequeremos.-
Esto no se soluciona así.
Volvio a sonar el móvil. Era Cristian.
Irene: ¿Si?
Tello: ¿A que me vas a compañar a comprarme ropa?
Irene: Si no tengo otra salida...
Tello: ¿Que te pasa? Te noto apagada...
Irene: Apagada y fuera de cobertura.
Tello: Te recogo a las 5, ¿Vale?
Irene: Vale, hasta luego.
Tello: ¡Besos!
Colgue.
Y me fui para la cocina allí me hize algo de comer y recogi lo poco que habia ensuciado.
Me eche en el sofá hasta las cuatro y media. Donde me empezaria a arreglarme. Aunque me pondría lo mismo que esta mañana, ya que apenas me habia dado tiempo a ensuciarlo.
Empezó a sonar el timbre, y yo estaba haciendome la plancha en el flequillo, asi que tarde en abrir.
Cuando llegue estaba Tello volviendo a tocar.
Irene: Yo ya estoy , ¿Si quieres no vamos ya?
Tello: Si.
Bajaron las escaleras, y se fueron andando hasta la tienda más proxima.
Irene: Pruébate estos pantalones...
Tello: Son rojos...
Irene: Muy bonitos, con una camiseta blanca, te queda chulisima.
Tello: ¿Elige una, y así me veo no?
Irene: Vale.
Empezo a buscar, y por fin la encontro.
Tello: Venga que ahora salgo.
Tardo lo suyo.
Irene: mmm ¿Te has ahogado con la camisa?
Tello: Sh, espera.
Tardo sus 5 minutos.. y por fin salió.
Irene: Ves como te queda muy bien.
Tello: No me veo...
Irene: Claro el espejo esta detras tuya.
Tello: No, que digo que no me veo con esta ropa..
Irene: Coño, date la vuelta.
Tello: Mejor me pruebo otra cosa.
Irene: Mira esa camiseta.
Tello: ¿Cuáles de todas?
Irene: Hostia, que la tienda es de eso nada más xD
Tello: ¿Esa azul?
Irene: Sí.
Tello: A ver tráela.
Fue a por ella, y se la probó.
Tello: Esta sí que me gusta. Me la quedó.
Fueron a pagar la ropa, y después fueron a tomar un helado.
Irene: ¿Que tal está Ibi?
Tello: De muy mal humor...
Irene: ¿Sí?
Tello: La verdad es que no nos ha dicho que te quiera, pero sí que está muy dolido, o eso parece.
Irene: Más estoy yo. Y no me quejo.
Tello: Pero es que, sigo sin entender el por qué de estar así.
Irene: Pues sí tu no lo entiendes, yo tampoco la verdad. Algunas veces em da gana de ir a su casa y decirle muchas cosas, no malas, claro, pero es que cuando lelga el moemnto de la verdad, me pongo muy nerviosa y no hay quién me saque.
Tello: Pero, lo que sí sé, es que será cuestión de tiempo.
Irene: Por mi ni cuestión de eso.
Tello: Mala.
Irene: Mala no, realista.
Tello: ¿Entonces porque me has preguntado por él?
Irene: Pues porque me preocupa. Pero son lapsus. No creo que pase más.
Tello: O pasará demasiadas veces..
Irene: O no.
Tello: Bueno tu dale un oportunidad, el pasado hay que dejarlo atrás.
Irene: Es que es inútil volver sobre lo que ha sido y ya no es.
Tello: Bueno, el sabrá que hacer. Pero ahora el tiempo dice que para casa que va a llover.
Volvimos de nuevo a casa y él se fue ya que tenía que entrenar y yo tenía que buscar trabajo.